Ha pasado un año

Ha pasado un mes y para ella es casi toda una vida. Ha cambiado muchísimo.

Para empezar durante el día presenta un patrón de comportamiento que si estamos juntas las dos, y el día transcurre con normalidad es muy intuitivo. Nos levantamos y nos vamos a la calle (10.00 más o menos, un poquillo más, diría yo) y en el paseo echa una cabezadita mientras bajamos la calle, al final... y dura cinco minutos. EL paseo se le hace interesante. Nos han regalado una mochila en la que la meto a ella, y va resguardadita y contenta mirándolo todo. Para mí siempre es más cómodo, ni carrito ni nada, las dos juntas y mis brazos libres. El paseo lo disfrutamos mucho más.

Cuando subimos la calle se vuelve a dormir después de montar un poco en cólera, es un "me quiero dormir, pero no puedo" y al final cae en brazos de morfeo. A eso de las doce volvemos a casa y está penosisima. hay vece sque se duerme a las una, otras se duerme a las tres conmigo en el sofá. Eso lo tiene claro, a ella las siestas acompañada es como más le gustan y si está agarradita de su teta adorada mejor que mejor. Duerme profundamente y yo con ella. Muchas veces me da la sensación de que si me levanto ella está adherida a mi como una lapa que se sujeta por mi pezón y podría andar teniéndola a ella colgando, jijiji.

Por las tardes, después de su/mi siesta (porque la siesta de ella es mi siesta) jugamos un rato.
Como le cuesta hacer su caquita (uy qué ñoña) le damos fruta ya, un poquillo de pera con plátano y se toma una cucharada y poco más. Claro, una cucharada repartida en varias cucharaditas pequeñas... Poco a poco irá comiendo, vamos a darle tiempo porque queremos que disfrute con la comida y que no sea una tortura tener que sentarse a comer. Hay algunas amigas que han convertido este acto en una gran pesadilla, tanto para ellas como para sus bebés. Se convierte en una pelea. Nosotros no, nosotros queremos disfrutar.. Pero esto es como todo, a ver cómo evolucionamos, ponemos la intención... a ver.

A las ocho la ducha, canciones, agua calentita recorriendo su cuerpecillo y relajándola y para terminar el día su teta. En ese momento y cuando ya no puede más se queda fritita.

Hay veces que me quedo yo fritita, hay veces que aprovecho para hacer mis cosas. Para charlar con Esposo y demás. Esos son nuestros ratos y puedo decir que más unida a él no puedo sentirme. Cada día me enamora más. Es cada día más importante y más necesario en mi día a día (valga la redundancia de ´dia y más día y más día :))

Este mes también se ha afianzado la amistad con las amigas del yoga. Son un grupillo de mamis en el cual me siento muy bien. Todas estamos compartiendo la misma etapa, las mismas inquietudes y la verdad es que lo pasamos muy bien cuando nos vemos. Una vez al mes todas juntas vamos a la reunion de lactancia, vemos a los niños, nos reimos y cada día tardamos más en volver a las casas, señal de estar muy bien juntas con los bebés, por supuesto. Son muy valiosas en mi día a día.

También puedo contaros que en twitter también se ha creado un grupo estupendo de madres. Ellas tienen hijos de todas las edades, chicos aun... y cuentan sus historias, está bien porque todas somos diferentes y bueno. nos complementamos.

En definitiva. Me siento mejor que nunca. Miro atrás y justo un día como hoy hace un año que comienza mi historia

Mi mejor historia