No sé si es que mi Inquilina se ha querido montar en el carro del viernes reivindicativo o qué, pero el viernes reivindicativo que se le llama le está durando más de un día... ya estamos a lunes para Martes y ahí está ella luchando por sus derechos.
Muchas veces me siento a obervar, para entender qué quiere expresar cuando con lágrimas en los ojos y furia contenida expone en un lenguaje poco conocido sus quejas más urgentes, con movimiento de manos y gesticulación incluidas. Ahí me veis, aguantando la risa una sonrisa, escuchando lo más seria que puedo, porque ¡ay de mí como se me escape la sonrisa!, que se me enfada más. Y sigo sin saber... Normalmente es que está harta de estar en la casa, o que quiere dormir a toda costa.
Me parto.
Esta etapa, como todas, se la achaco a la edad. Es momento de empezar a hacerse un hueco en el mundo, en mi mundo y en el suyo, y no es tarea fácil puesto que es clave en su desarrollo personal.
Es cansado para mí lidiar con todo en determinados momentos. Por ejemplo, a la hora de comer.
Esta es una hora en que se juntan; Una niña con hambre y con sueño y hacer la comida con todo lo que ello conlleva.
Sí que sí... podría hacer la comida pronto por la mañana, pero no jugaría con ella a penas, no saldríamos de paseo ni nada. También puedo hacer la comida la tarde de antes, pero entonces esque voy a estar haciendo cosas de la casa todo el día... y, queridas lectoras y queridos lectores (si es que los hay) yo por las tardes quiero despedirme de la plancha, la comida, la cocina y demás... yo por las tardes quiero disfrutar de mi familia, pequeña como es... Para mí es grande, lo más grande que tengo y quiero hacer con ellos cosas divertidas, ir a comprar al carrefour, por ejemplo que no me gustaba... ahora me gusta, pasa la tarde agradable y echamos unas risas.
Supongo que la clave para todo esto es la paciencia. Supongo que lo mejor que se puede hacer es fluir, pero cuesta... es complicado fluir cuando quiero dormir una siesta y justo ella se está despertando. Mi chatungo está por aquí y se hace cargo muchas veces, menos mal. Tenemos suerte... ambos.
Es complicado fluir cuando quieres dormir profundamente algun día, y no puedes, porque la inquilina del cuarto de al lado se despierta alguna que otra vez o muchas veces. El sueño acumulado se hace notar.
Pero luego te levantas y la ves, sonriente dándote los buenos días con una sonrisa, cualquier sonrisa de ella es la mejor de todas las que pueda recibir en el día. Una sonrisa completamente sincera y es toda para mí.
BUENOS DÍAS MAMÁ
Y saludamos a los coches que se ven desde la ventana, a los árboles y a los pajarillos, dándole buenos días al día con un espíritu festivo envidiable que es el que sólo los niños tienen. Lo miran todo, observan, aprenden y se llenan de cada instante de la vida.
Palpando mi cara. Mirándome a los ojos. Dándome su manita para dormir. Abrazándome y volviéndome a mirar... Se me olvida todo y comenzamos uno y otro día creciendo juntas... Ella me hace crecer
Así... es como ella hace que fluya. Así es como ella hace que me sienta agradecida CADA DÍA por haberla conocido.
Hace que sus quejas reivindicativas, sean una muestra más de su persona de quien es o quién será.
Eso me hace feliz
Esta etapa, como todas, se la achaco a la edad. Es momento de empezar a hacerse un hueco en el mundo, en mi mundo y en el suyo, y no es tarea fácil puesto que es clave en su desarrollo personal.
Es cansado para mí lidiar con todo en determinados momentos. Por ejemplo, a la hora de comer.
Esta es una hora en que se juntan; Una niña con hambre y con sueño y hacer la comida con todo lo que ello conlleva.
Sí que sí... podría hacer la comida pronto por la mañana, pero no jugaría con ella a penas, no saldríamos de paseo ni nada. También puedo hacer la comida la tarde de antes, pero entonces esque voy a estar haciendo cosas de la casa todo el día... y, queridas lectoras y queridos lectores (si es que los hay) yo por las tardes quiero despedirme de la plancha, la comida, la cocina y demás... yo por las tardes quiero disfrutar de mi familia, pequeña como es... Para mí es grande, lo más grande que tengo y quiero hacer con ellos cosas divertidas, ir a comprar al carrefour, por ejemplo que no me gustaba... ahora me gusta, pasa la tarde agradable y echamos unas risas.
Supongo que la clave para todo esto es la paciencia. Supongo que lo mejor que se puede hacer es fluir, pero cuesta... es complicado fluir cuando quiero dormir una siesta y justo ella se está despertando. Mi chatungo está por aquí y se hace cargo muchas veces, menos mal. Tenemos suerte... ambos.
Es complicado fluir cuando quieres dormir profundamente algun día, y no puedes, porque la inquilina del cuarto de al lado se despierta alguna que otra vez o muchas veces. El sueño acumulado se hace notar.
Pero luego te levantas y la ves, sonriente dándote los buenos días con una sonrisa, cualquier sonrisa de ella es la mejor de todas las que pueda recibir en el día. Una sonrisa completamente sincera y es toda para mí.
BUENOS DÍAS MAMÁ
Y saludamos a los coches que se ven desde la ventana, a los árboles y a los pajarillos, dándole buenos días al día con un espíritu festivo envidiable que es el que sólo los niños tienen. Lo miran todo, observan, aprenden y se llenan de cada instante de la vida.
Palpando mi cara. Mirándome a los ojos. Dándome su manita para dormir. Abrazándome y volviéndome a mirar... Se me olvida todo y comenzamos uno y otro día creciendo juntas... Ella me hace crecer
Así... es como ella hace que fluya. Así es como ella hace que me sienta agradecida CADA DÍA por haberla conocido.
Hace que sus quejas reivindicativas, sean una muestra más de su persona de quien es o quién será.
Eso me hace feliz
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