sábado, 25 de mayo de 2013

Monos de feria

Hoy, al pasear con una amiga me he dado cuenta de algo. 

Cuando hemos llegado, las niñas se han abalanzado primero, luego besito de aquella manera y luego un HOOOOLAAAA con toda la mano abierta y los dedos alejados unos de otros. Sólo los niños saben saludarse tan sinceramente, sólo ellos son capaces de no saludar si no quieren y saludar si quieren... ellos son pequeños y tienen esa licencia.

Las montamos en sus carritos para comenzar un paseo a las diez de la mañana por la playa, sol radiante, briza marina y su olor, las gaviotas, los gatillos y en medio de todo los gritos de dos niñas histéricas que no querían ir en carrito. No me importaría dejar a mi Inquilina que fuera andando, es más me encantaría, pero como aun gatea, pues nada... la otra, la hija de mi amiga, esa si que corre trepa y todo lo demás, por ello no se fiaba mi amiga, dice "lo peor es que si la llamas no viene, ella no viene" soltando un suspiro al terminar. 

Nos sentamos en una cafetería con la ilusión y la esperanza de que con las galletas, el agua, la arena y demás pudiéramos estar tranquilas, cruzar dos palabras entre adultas sin tener que parar muchas veces para ir corriendo por una que se va a la orilla corriendo o a por la otra que va gateando a la velocidad de la luz camino al columpio más cercano. Exacto, ocurrió lo que piensas, lo que es obvio... Ni una palabra de aadultas, corriendo detrás de una y otra en diferentes direcciones.

Desesperadas, decidimos interactuar con ellas, jugar de alguna manera entre las cuatro.

Me he dado cuenta de que no hemos jugado. Hemos hecho una detrás de otra las monerías que sabe una niña y la otra, pero UNA DETRÁS DE OTRA... repetidas veces para mejorar la técnica.

Al montarme en el coche ha sido cuando he caido en la cuenta, no sé si es bueno o malo, sólo sé que no me ha gustado la idea de ver a mi inquilina como una Mona de feria, tan chica, "¿Cómo hace el perro? ¿Cómo hace el pato?" Tal y cual cosa... una detrás de otras, no son payasitas... NO.

No quiero que aprenda cositas para ir enseñándolas como si fuera una mona de feria... NO, y sin embargo cuando estamos con las abuelas, las primitas y demás, siempre, sin darme cuenta, la insto a que haga alguna monería que ha aprendido.

¿Y eso para qué? ¿Para demostrar qué? No lo entiendo ni me entiendo. Quiero que aprenda porque quiero que aprenda, no para nada más.

Pobrecilla, ¿qué pensará?

- Ya está aquí mi madre que sí, que sí... el elefante iiiiiiii

No son monos de feria, son niños bonitos locos por aprender

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