lunes, 11 de junio de 2012

Pensando Pensando, Las Madres... Ahora lo soy!

Siempre he estado más familiarizada con ser hija que con ser madre y ahora no sé, serán las Inquilina, pero me estoy empezando a poner en el pellejo de las madres. Y francamente pienso que en algunas ocasiones los hijos, somos muy egoistas.

No paro de pensar en las veces que mi madre esperaba a que llegara para poder hablar como siempre habíamos hecho antes de convertirme en un poco más mayor. Cuando eres una niña todo va sobre ruedas, las situaciones las vas controlando hasta que empiezan los años adolescentes y no tienes ganas de hablar casi nunca con tu madre, es entonces cuando las hormonas empiezan a aparecer y a revolucionar todo el mundo interior.

Me veo pensando así y me siento un poco vieja, y además pienso en mí como madre y me gustaría que mi hija siempre sea niña, jejej creo que todas las madres tienen el mismo deseo, todas las madres quieren controlar la situación, mientras son pequeños los podremos resguardar de cualquier choque voluntario o involuntario para que no caigan.

Por otra parte, el caer te enseña a levantarte, pero es tan dolorosa la caida... tanto... que no puedo evitar sentir que debo proteger a esta criatura que viene en camino de todo, no me quiero convertir en una madre amargada, pero no quiero que mis hijos sufran o me dejen sola en el futuro.

Tengo una prima joven, de 17 años y no trata a su madre con el respeto que debe. Una madre que le ha dedicado noches y noches de llantos por cólicos, noches y noches despierta con y para ella, para que estuviera bien, mi tia y mi tio, tanto a ella como a su hermano le han consagrado sus vidas y, la niña, no le está correspondiendo.

Me acuerdo de mí a los 17 años y tampoco correspondí muchas veces a mi madre como se lo merecia, aunque siempre volvía a ella, de alguna manera o de otra, siempre volvía a acurrucarme, mi madre y yo hemos tenido una relacion un poco extraña, más amigas que otra cosa. estas cosas tienen cosas buenas y cosas malas, porque una madre no es tu amiga, pero la mia... al menos para mí, en muchas ocasiones lo ha sido.

Pienso en el concepto de familia, ¿cuántos muchachos de edades difíciles y no tan difíciles tratan mal a sus padres? Muchos, hay un programa en la tele que habla de ellos.

El programa es Hermano Mayor. Y los chavales que salen son ya chavales mayorcitos, ni estudian, ni trabajan y ponen la mano por dinero, luego... va el padre y ¿qué va a hacer? le da dinerito al niñato... que después se lo gasta en gilipolleces. Son los llamados NiNis, que tan de moda están (que por cierto tienen más cara que espalda), y chillan a sus padres, les pegan unos rachones que me quedo espantada, unos malos modos... unos destrozos en las casas, puertas rotas en mil pedazos y demás (casas que no han pagado ellos)... Es inadmisible.

Ahora bien, si miramos atrás, ese chaval o esa joven, fueron pequeños algún día, fueron traidos al mundo con mucha ilusión, tuvieron cobijo en su niñez, Navidades, Reyes, regalos por su cumpleaños... ¿para qué? ¿para eso? pues ¡vaya mierda!. Me da miedo que me toque un temperamental así. No sé lo que haría... Pero seguramente no aguantaría mucho.

La verdad es que me dolería mucho que mi hija, el día de mañana, me alejara de su vida. Muchas madres están así y es muy triste.

2 comentarios:

  1. Hola guapi, estoy de acuerdo contigo en que a veces los adolescentes no responden como deben, pero es lo que tiene la adolescencia, es el periodo de ir madurando bajo rebeldía... en cuando al programa que mencionas, das por hecho que esos chicos fueron criados con amor en su infancia, yo sinceramente lo dudo mucho. Detrás de cada caso de ese tipo que ya adquiere una gran gravedad, hay normalmente familias que perdieron su estructura con el paso del tiempo, antiguos niños ignorados y miles de cosas más, no todo es como parece. Un beso

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  2. Que duro, pero real, los hijos somos egoistas en algún momento de nuestras vidas o en todos no lo se. Da miedo pensar en la adolescencia...

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Gracias por tu comentario. Siempre es un placer verte por aquí, conversar e intercambiar experiencias, es lo que hace rico este blog. Un beso